Blogia
Kosh

LAS PALABRAS JUSTAS

Esto que escribo es una opinión personal, y acepto que se pueda o no coincidir conmigo, pero es que no soporto cuando escucho a un argentino que, porque vive acá, comienza a “imitar” el acento español o, peor aún, que utiliza expresiones que nunca dijo en su vida y además las fuerza para que encajen en frases como para hacerse los artistas.

Ojo, una cosa es reemplazar un sinónimos en los casos en que no se conoce o no se entienden una palabra. Por ejemplo, si uno dice “baúl” refiriéndose al coche un español no lo entiende, y para no andar explicando mejor decir “maletero”. Y como esa hay decenas: aparcar = estacionar, computadora = ordenador, camiseta = remera, falta = pollera, piloto = gabardina, jersey = sueter… bueno, y podría pasarme todo el día, pero la idea esta.

Incluso hasta acepto que luego de mucho tiempo se quedan algunas palabras adheridas al vocabulario sin querer, como en mi caso el “vale”, o el “deputamadre” (todo junto sin espacios) y alguna otra que me sale sin pensar y sin forzar.

Pero lo que digo es cuando escuchas, por ejemplo, a un argentino que resigana el “vos”, o el “ustedes”, o el cambio de acentuación (ejemplo: ““tenés” x “tienes”) para encajar a una manera de hablar que queda tan patética como cuando un español se nos pone a intentar imitar el acento argentino (por lo general diciendo: “qué bueno que viniiiiste”).

0 comentarios