TIERRA DEL FUEGO

El sonríe cuando llora
aunque llore de verdad.
A los ángeles que guardan
toda esa eternidad.

Toca el cielo con las manos
no lo vemos desde acá.
El rosario que rezaba
lo aplastó la realidad.

Suspira y muere un pobre
todo pasa y sigue igual.
No es tan trágica la muerte
no es difícil de olvidar.

Mientras llueve ella espera
que la aplaste una ciudad.
Son los últimos terrenos
que olvidó la humanidad.

Hoy su sueño sigue en coma
su horizonte sin final.
Son las piernas del un continente
que no pueden caminar.

No ha llegado aquel rey blanco
no hay riquezas que tomar.
De la nada hacia la nada
Sopla el viento sin cesar.

Mas allá, tan vulgar
como un rayo sobre un mar.
Para bien, para mal
no te dejes conquistar